hola esperanza, hace mucho que no te saludo, ¿que tal estás, bien? me alegro de verte por aquí.
besos Manola, me ha impactado lo que has contado, no por la historia en sí, sino por el hecho de que tu madre no te dejase ir a actos festivos mientras tu padre trabajaba.
Aunque entonces te cogieras buenas rabietas, seguro que hoy, con otra perspectiva, sabes apreciar cuánto había en esa conducta de respeto hacia el trabajo duro y peligroso de los mineros, que arriesgaban su vida para sacar adelante a su familia.
Besos. Hola Esperanza. Aún no estoy con mis nietos. Estaré en unos días. Mª Merce, antes, cuando vivía mi madre y venía a verla Mari (la madre de Mª José) sí que nos contaba cosas. Ahora hace mucho que no la veo. Ramsay (al que encuentro de vez en cuando) me dijo un día que Mari está delicada.
Creo que Mª José, antes, vivía en Madrid. Y lo de su hermano, respecto a lo que tú comentas, creo habérselo oído a alguien, pero si lo veo no lo conozco. Por cierto Jovita, ¿sabes algo de ella?, creo que leí que su hermano tiene una pensión en Puertollano, pero de ella no se nada.