Las
flores cubrieron por completo con su
color el gris del marmol y el granito, pero el cariño y el recuerdo de tantos que le han querido las hicieron más hermosas:
"Los recuerdos
felices no mueren.
Inundan de color nuestra existencia...
Vivos para siempre,
desechando la nostalgia,
sin rozar la soledad o la tristeza.
como el brillo de la luz en el
camino..... (C. F.)