Adolfo del Cacho, me ha hecho mucha gracia lo que has contado de los tres "romeros" ¡que jodío el chato, como los engañó!. Esto me recuerda cuando mi padre nos contaba, que un día el chato invitó a él, a Vinagre, Mariano y algunos más, que no recuerdo, a comerse un conejo, y después de terminar, les preguntó, ¿cómo estaba el gato que se terminaban de comer?. Ya te puedes imaginar la cara de los comensales. Mas o menos igual que la de los "romeros".
Esto son anécdotas suyas, pero era una excelente persona, y con mucho sentido del humor.
Adolfo, sigue deleitándonos con historias tan divertidas, y tan reales, como ésta.
Besos para Isi y para ti.
Esto son anécdotas suyas, pero era una excelente persona, y con mucho sentido del humor.
Adolfo, sigue deleitándonos con historias tan divertidas, y tan reales, como ésta.
Besos para Isi y para ti.
Graci, anda que la cara que pondrían los invitados al conejo cuando les soltó lo del gato.
Como tú bien dices el Chato era una persona excelente, pero también una buena pieza haciendo bromas.
Como tú bien dices el Chato era una persona excelente, pero también una buena pieza haciendo bromas.