¡Esta no se la perdono a Manolo Castaño Nuñez ¡(apellidos y todo). Como anoche no aparecio para llevarme al carnaval, al final sucedió y me perdi. Encima mi disfraz de gatito atrajo a todos los perros de Diogenes y cercanias y aqui pase toda la noche, ¡subida en este arbol ¡, menuda carrera me di para que no me pillaran, aunque algun que otro mordisquito me lleve, el traje acabo hecho añicos. Vaya noche de Carnaval. Ahora eso si, por mas que gritaba no me oiais, se ve que lo pasabais de miedo.
Bueno, otra vez será.
Bueno, otra vez será.
Balti, no te enteras, os dije que Manolo Castaño estaba ayudando a su abuela a hacer las porras. Por cierto, Manolo, riquísimas. Es que en nuestra tierra todo es bueno y sino que se lo pregunten a Ita-Guada con esa chicha que se traen de Alcaracejos, además es light no engorda nada.
El Castaño, el Morón y el Maroto, deben estar por ahí dando la murga. Habrá que verlos a los tres y el Perico debe estar viendo a sus niños disfrazados. El no se disfraza porque ya nacio con el puesto.