Hoy también me toca cocinar también a mí.
Nos vamos a
comer un pollo de la
finca de Valdefuentes, que ha volado hasta
madrid para ser ingerido por esta
familia descenciente de Diogeneros.
Lo de volar es mentira, pero que ha venido en el
coche, eso si que va ha misa.
Besos y abrazos.