Rafi, estoy ya un buen rato delante del ordenador, intento escribir y no puedo, ¿me has leido el pensamiento?. Solo me salen lágrimas. Después de volvernos a encontrar, después de muchos años, a pesar de las pocas veces que los he tratado, les tengo un gran aprecio y cariño.
Abrazos.
Abrazos.