Noemí, no tengo pijama de lunares; es que se me extraviaron unos cuantos y los busco durmiendo. Cuando encuentro algunos los conservo en una cajita de lunares que me regalaron, los
amigos del
foro, en uno de nuestros encuentros.
Siempre nos haces sonreír con las anécdotas infantiles.
Un abrazo