Historia sobre barbos:
Tendría yo como 7-8 años, en verano, madrugaba más de la cuenta y me marchaba ha pecar al Canal de Castilla (100 mts. de mi casa).
El artilugio de pesca consistia en, una caña de las que ponían en los toldos de los carros, un sedal atado a la punta de la caña, un corcho de las botellas, (algunas veces un trozo de pluma de gallina), y un anzuelo (lo más difícil de conseguir).
Pescaba "mermejas", pececillos de crias de barbo (a mi viejilla la encantaban), construía una pecera que hacia con dos juncos, los ensartaba por las agallas y así hasta que me cansaba de estar a la orilla del rio.
Una buena mañana, se presentó la pareja de la guardia civil, me pidieron la licencia de pesca y claro, no la tenía, me requisaron los artilugios de pesca y la mercancía pescada y me dijeron, "dile a tú padre que se pase por el cuartel",
con el respeto que teníamos a los del tricorio, me quedé paralizado, cuando llegue a casa medio llorando, me preguntaron que me había pasado, explique el caso a mi viejilla y por la tarde cuando llego mi padre de trabajar, se paso por el cuarteel y les dijo a los guardias que, qué daño podía hacer un niño de 8 años pescando aquellos pececillos, con un palo y un sedal.
No le devolvieron los artilugios y le advirtieron que si no sacaba la licencia, la proxima vez, me multarian. (represión total).
Así que ha partir de ese día con mi licencia, seguí pescando en el Canal de Castilla.
Yo no los he pescado tan grandes como nuestros pescadores Diogeneros, pero también tengo algunas capturas importantes, pero no tenía maquina fotográfica, jajajaja
B+a.
Tendría yo como 7-8 años, en verano, madrugaba más de la cuenta y me marchaba ha pecar al Canal de Castilla (100 mts. de mi casa).
El artilugio de pesca consistia en, una caña de las que ponían en los toldos de los carros, un sedal atado a la punta de la caña, un corcho de las botellas, (algunas veces un trozo de pluma de gallina), y un anzuelo (lo más difícil de conseguir).
Pescaba "mermejas", pececillos de crias de barbo (a mi viejilla la encantaban), construía una pecera que hacia con dos juncos, los ensartaba por las agallas y así hasta que me cansaba de estar a la orilla del rio.
Una buena mañana, se presentó la pareja de la guardia civil, me pidieron la licencia de pesca y claro, no la tenía, me requisaron los artilugios de pesca y la mercancía pescada y me dijeron, "dile a tú padre que se pase por el cuartel",
con el respeto que teníamos a los del tricorio, me quedé paralizado, cuando llegue a casa medio llorando, me preguntaron que me había pasado, explique el caso a mi viejilla y por la tarde cuando llego mi padre de trabajar, se paso por el cuarteel y les dijo a los guardias que, qué daño podía hacer un niño de 8 años pescando aquellos pececillos, con un palo y un sedal.
No le devolvieron los artilugios y le advirtieron que si no sacaba la licencia, la proxima vez, me multarian. (represión total).
Así que ha partir de ese día con mi licencia, seguí pescando en el Canal de Castilla.
Yo no los he pescado tan grandes como nuestros pescadores Diogeneros, pero también tengo algunas capturas importantes, pero no tenía maquina fotográfica, jajajaja
B+a.
Leches! pecar, no, pescar.
B+a.
B+a.