Hoy quiero recordaros como jugaban a las casitas las niñas de Diógenes, primero teniamos que levantar la casa en una pared o en el tronco de una encina, lo principal era barrer y barrer y dejar mucho espacio muy limpio luego nos ibamos a por los muebles a varios estercoleros, las latas nos daban mucho juego unas nos hacian de floreros porque le poniamos amapolas, y las de las sardinas las poniamos de mesa o de piscina, nos haciamos nuestra entrada de la casa con muchas piedrecitas, siempre habia alguna que tenia una tienda y como buena tendera tenía más trabajo ya que tenia que buscar mas cosas, luego ibamos a comprarle y pagabamos con los billetes que haciamos de papel. Muchos bésos para quien recuerde esto. me voy a comer el hornazo.