Ese casco de minero dice mucho de nuestro pueblo. Son recuerdos que comparto con vosotros. Rafa hijo de Rafalillo, espero os encontréis bien y haber cuando nos haces soñar con uno de tus preciosos y profundos escritos. ¡venga! las raices diogeneras necesitan un empuje en estos momentos. Un abrazo Rafa.