MINA DIOGENES: Córcholis Tito Germán, pero que sensible eres, eso...

Según voy escribiendo, estoy oyendo el viento por la venta. Me gusta escuchar el viento, no sé porqué pero me gusta. Es por ello que me haya apetecido buscar un poema que hablara del viento, y aquí está; es de Octavio Paz.
Un abrazo amigos diogeneros.

Viento

Cantan las hojas,
bailan las peras en el peral;
gira la rosa,
rosa del viento, no del rosal.
Nubes y nubes
flotan dormidas, algas del aire;
todo el espacio
gira con ellas, fuerza de nadie.

Todo es espacio;
vibra la vara de la amapola
y una desnuda
vuela en el viento lomo de ola.

Nada soy yo,
cuerpo que flota, luz, oleaje;
todo es del viento
y el viento es aire siempre de viaje.

Córcholis Tito Germán, pero que sensible eres, eso está pero que muy bién, y tienes mucha razón, es una gozada oir el murmullo del viento, siempre que no se ponga peligroso para nadie. Muy bonito el poema. Besotes para tu Madrileña y para ti, eso que no falte que ya hay mucha falta en este Mundo.

Efectivamente sobrina, que el viento sólo sea ese viento que inspira a los poetas y a los que no lo somos, nos inspira a leer lo que ellos escriben.

Hablando del viento he recordado un piropo que aprendí cuando estaba haciendo la mili en Córdoba. Un compañero se lo escribió a su novia en una carta y yo creo que todos los que lo leímos lo copiamos para mandárselo a nuestras chicas del momento. Más o menos decía así: ………. Si notas una ráfaga de viento frío, no te asustes vida mía, que son suspiros ... (ver texto completo)