Vaya tormenta de agua que ha caído por mi barrio esta tarde, afortunadamente ha refrescado el ambiente, ahora se esta fenomenal.
Mariano, por la sierra madrileña, igual. Daba gusto abrir la ventana, venía el fresquito y el olor a hierba segada. Una maravilla.
Abrazos.
Abrazos.
Marce en los pueblos de la sierra es otra cosa, te pasa algo parecido a Rafy, hau varios grados menos que en la ciudad. Un abrazo