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MINA DIOGENES: Desconfío absolutamente de los anónimos. Creo que el...

Desconfío absolutamente de los anónimos. Creo que el que envía su comentario a las 0,53, del día 12, no es Juan Ramón Maroto (al que agradezco, por otra parte, igual que a Jovita y a los demás el interés por la película). No sé si Giménez-Rico ha confesado que la historia narrada en la película es "seca, triste y sin esperanzas", dentro del marco de la posguerra. Creo que si es así, cosa que no dudo, el anónimo de las 0,50 saca esta frase del contexto (en mi opinión con poco acierto). En fin, me gustaría saber sencillamente si es Juan Ramón quien ha enviado ese comentario. Sí es así me quedo muy feliz y tranquilo, porque es buen amigo y buena persona; de no haber sido él, quien haya sido que se identifique. Me aburren, me molestan y me ponen mal cuerpo los anónimos. Quien ponga algo en este u otro foro que sea valiente y dé la cara. En fin, no quiero que este foro se estropee con anónimos que tanto me molestan tanto si elogian y son positivos, como si son negativos y tiran por tierra cualquier asunto. Para terminar, diré que la historia que se narra en mi novela es un relato triste, pero no seco ni desesperanzado, que evoca la vida de un hombre que vuelve a su tierra natal después del exilio para perdonar a los demás y para perdonarse a sí mismo. Es, por tanto, una historia triste de amor, pero nunca seca ni desesperanzada, en mi opinión, claro está.
No me gusta ponerme triste, ni desesperanzado, por culpa de los malditos anónimos, sean positivos o negativos; me gusta mirar a la gente frente a frente, cara a cara, con la mirada limpia y transparente. Si alguien empieza con los anónimos retiro mis armas "pacíficas", mis palabras, mis versos, mis escritos, a los cuarteles de invierno y enmudezco. Sólo he querido salir al paso de comentarios "fantasmas" que me molestan y con los que no estoy de acuerdo, no ya por lo que dice el director de la peli, Antonio Giménez-Rico, quien me parece una excelente persona y de quien me considero amigo; más bien me molesta quien utiliza sus comentarios suyos con una mirada parcial, sesgadamente, fuera de contexto, para despistar al personal. Bueno, perdonad estas palabras algo tristes y amargas. Sólo quiero enviaros a todos los amigos y amigas de este magnífico foro de Minas Diógenes un entrañable y cálido abrazo. Vuestro buen amigo y paisano, Alejandro López Andrada. Os quiero.