Hola familia diogenera:
Me acabo de enterar que sigue la juerga por Getafe.. me parece extraordinariamente, os deseo que sigais escudriñando la imaginación para continuar los encuentros.
Emilio el de Maroto: efectivamente mi padre vive en Solana del Pino, está bién de todo, siempre dice que "cada dia mas joven". Voy a verlo todo lo amenudo que puedo, desde Madrid con el AVE es cómodo. Comentamos de Diógenes y del foro, y se esribe con tu hermano, tambien le hablé de tu incorporación me relata vivencias muy divertidas... Lo mismo que de LA HORTENSIA y la Hortensita...
Mi madre murió hace veinte años, con sesenta y dos, en Villaviciósa de Asturias. Desde que conocí lo del foro estoy recomponiendo los recuerdos que en ella siempre eran como si Diógenes sus niñas y las familias fueran presente. Ella vivió aferrada y nunca se adaptó al norte, y sus costumbres.
El sentimiento de desarraigo, y de haber perdido las raices nos lo transmitió en vena. Por suerte yo me estoy limpiando y con cada encuentro recupero la alegria de SER de La Mina
Un saludo, y que consumamos con cabeza...
Me acabo de enterar que sigue la juerga por Getafe.. me parece extraordinariamente, os deseo que sigais escudriñando la imaginación para continuar los encuentros.
Emilio el de Maroto: efectivamente mi padre vive en Solana del Pino, está bién de todo, siempre dice que "cada dia mas joven". Voy a verlo todo lo amenudo que puedo, desde Madrid con el AVE es cómodo. Comentamos de Diógenes y del foro, y se esribe con tu hermano, tambien le hablé de tu incorporación me relata vivencias muy divertidas... Lo mismo que de LA HORTENSIA y la Hortensita...
Mi madre murió hace veinte años, con sesenta y dos, en Villaviciósa de Asturias. Desde que conocí lo del foro estoy recomponiendo los recuerdos que en ella siempre eran como si Diógenes sus niñas y las familias fueran presente. Ella vivió aferrada y nunca se adaptó al norte, y sus costumbres.
El sentimiento de desarraigo, y de haber perdido las raices nos lo transmitió en vena. Por suerte yo me estoy limpiando y con cada encuentro recupero la alegria de SER de La Mina
Un saludo, y que consumamos con cabeza...