No creo Cubero, pues menudas antorchas se preparan jejej, como para que no puedan encender. Por cierto, hace un rato he hablado con mi hermana, no sabia que habia entrado en Internet, pero me ha pedido la disculpe contigo, empezó dirigiéndose uno por uno, pero en éstos días ya se sabe que entre paciente, visitas, llamadas y sus propios ojos, que también los tiene regular, tuvo que cerrar dejándose al más grandullón, esperemos que la próxima vez que acceda al PC empiece contigo y así sea en otro el ... (ver texto completo)
No hay de que disculpar, entiendo el momento por el que esta pasando y es normal que tenga la cabeza en el “cuadro” si me permites llamarle así, pero ahora se le acumula el trabajo también..