¡A RENACER EN BELÉN!
Si quieres nacer, zagal,
con la alcurnia de este Niño,
cambia tu cardo en armiño
y ven conmigo al portal.
Para tu abeja es panal
y de tu lobo es cordero.
Toca con fuerza el pandero
y dales cuerda a tus pies...
que esta noche, si lo ves,
te nacerás verdadero.
Si quieres crecer, chaval,
y hacerte grande y pequeño,
pon tu sueño y pon tu empeño
en ese Niño real
que tornará tu ideal
en hombre humano y divino.
Baja hasta el Niño y con tino
ve subiendo hasta su altura...
que, aunque la Noche es oscura,
lleva al Sol este Camino.
Si quieres amar, zagal,
e inundar tu corazón
de la mas viva pasión,
amapola tu trigal
con la sangre virginal
que surte esta Fuente niña.
El vino de su campiña
tu corazón apasiona,
y, al tiempo que te expansiona,
siembra en tu copa su Viña.
Si quieres ser pan, chaval,
y ser comida de hermanos,
no temas sembrar tus granos
ni te duelas de tu mal:
serás espiga y trigal
y devendrás tú también
"Casa del Pan" cual Belén,
al que de todos los vientos
se encaminen los hambrientos
en bullicioso vaivén.
Si quieres vivir, zagal,
y en tu vida hallar fortuna,
embárcate en esta Cuna,
rema y rema hasta el final:
Es mar y puerto el Portal
al que tu río encaminas;
y si en sus olas divinas
hallaras naufragio y muerte,
no temerás por su suerte
tus rosas y sus espinas.
Si quieres ser tú, chaval,
y no quieres falsearte,
ha en este Niño tal arte
de asomarse a tu cristal,
que, al par que su original,
refleja tu copia humana.
¡Que bella, esbelta y ufana
con tal Niño tu figura,
y de que modo depura
su pureza soberana.
JUAN SÁNCHEZ TRUJILLO ... (ver texto completo)
Si quieres nacer, zagal,
con la alcurnia de este Niño,
cambia tu cardo en armiño
y ven conmigo al portal.
Para tu abeja es panal
y de tu lobo es cordero.
Toca con fuerza el pandero
y dales cuerda a tus pies...
que esta noche, si lo ves,
te nacerás verdadero.
Si quieres crecer, chaval,
y hacerte grande y pequeño,
pon tu sueño y pon tu empeño
en ese Niño real
que tornará tu ideal
en hombre humano y divino.
Baja hasta el Niño y con tino
ve subiendo hasta su altura...
que, aunque la Noche es oscura,
lleva al Sol este Camino.
Si quieres amar, zagal,
e inundar tu corazón
de la mas viva pasión,
amapola tu trigal
con la sangre virginal
que surte esta Fuente niña.
El vino de su campiña
tu corazón apasiona,
y, al tiempo que te expansiona,
siembra en tu copa su Viña.
Si quieres ser pan, chaval,
y ser comida de hermanos,
no temas sembrar tus granos
ni te duelas de tu mal:
serás espiga y trigal
y devendrás tú también
"Casa del Pan" cual Belén,
al que de todos los vientos
se encaminen los hambrientos
en bullicioso vaivén.
Si quieres vivir, zagal,
y en tu vida hallar fortuna,
embárcate en esta Cuna,
rema y rema hasta el final:
Es mar y puerto el Portal
al que tu río encaminas;
y si en sus olas divinas
hallaras naufragio y muerte,
no temerás por su suerte
tus rosas y sus espinas.
Si quieres ser tú, chaval,
y no quieres falsearte,
ha en este Niño tal arte
de asomarse a tu cristal,
que, al par que su original,
refleja tu copia humana.
¡Que bella, esbelta y ufana
con tal Niño tu figura,
y de que modo depura
su pureza soberana.
JUAN SÁNCHEZ TRUJILLO ... (ver texto completo)