de éstas, las que yo leía, solo por imitar a mis primos, eran las de hazañas bélicas, recuerdo ir a despedir a mis tios y primos que marchaban para Barcelona, en aquellos años que la mayoría salían de nuestro pueblo buscando mejorar su situación económica, pues recuerdo que mi primo Ángel, al despedirme de él, me dejó el hazañas bélicas que llevaba para el camino, yo lo conservé, no se por cuanto tiempo, lo leí y releí, pese a no gustarme las cosas violentas, pero era de mi primo y era su regalo y su recuerdo.