Vamos a ver: he leído, por alguna parte, que se ha producido un gran acontecimiento: alguien ha abierto su ojos y visto el mudo por primera vez:
! felicidades!
Me ha venido a la idea, de brevemente, cantar a la mujer... niña y luego mujer:
quisiera lograr, unos versos, y llamarles:
NACER... CRECER.
Decía ELLA ayer:
tierna amapola...
Me canta ella- niña, luego mujer-
en alondra y voladora mariposa,
colorida ilusión, rosa temprana
! Soñar!... Florecer como una rosa
hermosa, de su primavera enamorada.
Se veía ELLA, crecer,
florecer en ave- pluma tierna-
Crecer, volar, sentir, y, a la vez
reír llorar, las lagrimas mas bellas.
Decía ayer cuando aprendió a crecer;
de sueños llena.
Decía ayer:
-ya no jugaba- se hizo amor
en su nuevo amanecer... después
cuando ya feliz enamorada.
Repite hoy suspiros de mujer
de su vientre hermosamente encendido
de cuando aprendió a aprender
a re reír a llorar, sufrir
cuidar amamantando los mas tiernos suspiros
Y ver a lo lejos que crecen amapolas
que acaricia un niño
que corre por los caminos,
tras de bellas mariposas...
Y que crece luego
y se queda sola en el llanto de las rosas-.
Y se ve evejecer en el hoy y el ayer.
En el grito de el amor callado.
En el siempre amanecer
de sus cuidados
Y en la última pausa, una mirada
y una mirada triste a lo que se fué
por la senda larga
J. M. (LIBERTAD)
! felicidades!
Me ha venido a la idea, de brevemente, cantar a la mujer... niña y luego mujer:
quisiera lograr, unos versos, y llamarles:
NACER... CRECER.
Decía ELLA ayer:
tierna amapola...
Me canta ella- niña, luego mujer-
en alondra y voladora mariposa,
colorida ilusión, rosa temprana
! Soñar!... Florecer como una rosa
hermosa, de su primavera enamorada.
Se veía ELLA, crecer,
florecer en ave- pluma tierna-
Crecer, volar, sentir, y, a la vez
reír llorar, las lagrimas mas bellas.
Decía ayer cuando aprendió a crecer;
de sueños llena.
Decía ayer:
-ya no jugaba- se hizo amor
en su nuevo amanecer... después
cuando ya feliz enamorada.
Repite hoy suspiros de mujer
de su vientre hermosamente encendido
de cuando aprendió a aprender
a re reír a llorar, sufrir
cuidar amamantando los mas tiernos suspiros
Y ver a lo lejos que crecen amapolas
que acaricia un niño
que corre por los caminos,
tras de bellas mariposas...
Y que crece luego
y se queda sola en el llanto de las rosas-.
Y se ve evejecer en el hoy y el ayer.
En el grito de el amor callado.
En el siempre amanecer
de sus cuidados
Y en la última pausa, una mirada
y una mirada triste a lo que se fué
por la senda larga
J. M. (LIBERTAD)