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Hoy voy a poner una nueva poesía, creo que es un poco diferente a las últimas.
TU AMOR
Aquel arroyo seco de mis ilusiones,
convertido en desierto de amargura,
es ahora el eden de mi alegría,
que el agua de tu presencia germina.
En el recuerdo, otros tiempos tristes,
y en el presente esperanza,
engarzada en el futuro, como comienzo,
de esa feñicidad que se vive y avecina,
como la aurora de ese sol que se levanta
que te deja ver su luz, aún en lontananza,
y te avisa su futuro poderío.
Palabras son, nada más,
podrían no ser verdad,
pero en el fondo de un cuerpo
donde hieren y acarician,
las penas y las venturas,
tú tienes un sitio allí,
donde tu cariño mismo,
y tu bondad tan sincera,
unidas con mis deseos,
al fundirse con mi amor,
son el cofre de un tesoro,
que pone rumbo a mis días,
cuando te digo otra noche,
te quiero, bonita mía.
TU AMOR
Aquel arroyo seco de mis ilusiones,
convertido en desierto de amargura,
es ahora el eden de mi alegría,
que el agua de tu presencia germina.
En el recuerdo, otros tiempos tristes,
y en el presente esperanza,
engarzada en el futuro, como comienzo,
de esa feñicidad que se vive y avecina,
como la aurora de ese sol que se levanta
que te deja ver su luz, aún en lontananza,
y te avisa su futuro poderío.
Palabras son, nada más,
podrían no ser verdad,
pero en el fondo de un cuerpo
donde hieren y acarician,
las penas y las venturas,
tú tienes un sitio allí,
donde tu cariño mismo,
y tu bondad tan sincera,
unidas con mis deseos,
al fundirse con mi amor,
son el cofre de un tesoro,
que pone rumbo a mis días,
cuando te digo otra noche,
te quiero, bonita mía.
¡HOLA LUIS BELTRÁN! No se por qué, me parece que eres bastante joven, tal vez, por tu forma de expresarte o de decir las cosas. Creo que la poesía que has puesto es bastante buena.
Te dejo esta.
MARIA, ¿A quien preguntas lo de los nietos? Si es a mí, te diré que tengo cuatro. De cuatro, dentro unos días, de tres hace unos días, de dos dentro de unas horas y de dos meses.
ME GUSTA MI PUEBLO
Siempre que voy por mi pueblo
me gusta gritar al Cielo,
para sentirme que estoy
andando por sus senderos.
Me gusta sentirme vivo,
circular por sus rincones,
o pasear por los campos
oliendo sus bellas flores.
Ir por agua a los positos,
aunque poca gente va,
pasear por el arroyo
de paneras “olvidás”.
Me gusta su cielo añil,
sus tejados colorados
y sus calles empinadas
por las que siempre he pasado.
¡Cuánto me gusta mi pueblo!
Y lo quiero recalcar.
¿Quién me presta unas palabras
para poderlo expresar?
A. E. I.
Te dejo esta.
MARIA, ¿A quien preguntas lo de los nietos? Si es a mí, te diré que tengo cuatro. De cuatro, dentro unos días, de tres hace unos días, de dos dentro de unas horas y de dos meses.
ME GUSTA MI PUEBLO
Siempre que voy por mi pueblo
me gusta gritar al Cielo,
para sentirme que estoy
andando por sus senderos.
Me gusta sentirme vivo,
circular por sus rincones,
o pasear por los campos
oliendo sus bellas flores.
Ir por agua a los positos,
aunque poca gente va,
pasear por el arroyo
de paneras “olvidás”.
Me gusta su cielo añil,
sus tejados colorados
y sus calles empinadas
por las que siempre he pasado.
¡Cuánto me gusta mi pueblo!
Y lo quiero recalcar.
¿Quién me presta unas palabras
para poderlo expresar?
A. E. I.
Efectivamente Antonio, la pregunta de los nietos era para ti, gracias por responder.
A mi también me gusta mi pueblo, pero yo si que tendría que pedir unas palabras prestadas para poderlo expresar, en cambio tú que fácil lo hiciste y que bonito.
A mi también me gusta mi pueblo, pero yo si que tendría que pedir unas palabras prestadas para poderlo expresar, en cambio tú que fácil lo hiciste y que bonito.