Bueno chavales, como al final las musas mañaneras, se me escaparon, trataré de extraviarme entre los árboles de la foto, e imaginarme me pierdo en un bosque de amor desesperado. Aún no lo se, pero es posible que sea solo tolerada para mayores de 18... al que no haya llegado ahí le presto unos cuantos, aunque solo sea en la vana esperanza de quitarme una canas, que mor cierto... por encima justo de las orejas ya estoy a mas de la mitad. Que paséis mientras tanto un feliz domingo. Si las musa me traicionan lo siento,. Si me abandonan lo borro y a otra cosa... La poesía creo que se diferencia de un hijo, en que al instante en que la has parido, te agrada o no te satisface.
Yo busqué de tu cuerpo aquel verano
algo mas que el ondear de tu cintura.
Yo caí en sus garras: en la hermosura
que ami me cautivaba, me hizo daño.
Legabas de un precoz amor adelantada,
joven y hermosa, dulce (aparente) criatura.
Experta molinera en andaduras;
apartabas la harina del salvado.
En un instante de amor lo vi muy claro...
al momento de iniciada la aventura.
Te sentí muy estudiosa en andaduras
y en aquella pereciera, a ti entregado.
Del encuentro, salí desesperado
en aquel alba: la primera amanecida.
Hoy no mendigo besos ni ternura
y se por eso que lo tuyo fue prestado.
Hoy me duele tu cuerpo, ali aplastado
al mío... y de la hierba percibo su frescura.
Pero tu cuerpo me quema, me tritura...
porque fuiste la paja y yo el grano.
No puedo evitar me grite aquel verano.
alentando mis ansias sucesivas.
Como me grita tu engaño... cuesta arriba
soy tan loco que aquel día aún reclamo.
Aún percibo tus cabellos, largos, largos,
y tus senos invitando a la caricia...
altivos que llamando me vencían:
Aún me veo en mi demencia a ti entregado.
Aún me veo demolido, destrozado:
reducida a escombros mi cordura,
aún te nombro de pasión en la locura;
echo añicos, extraviado, destrozado.
MONEDERO.
Yo busqué de tu cuerpo aquel verano
algo mas que el ondear de tu cintura.
Yo caí en sus garras: en la hermosura
que ami me cautivaba, me hizo daño.
Legabas de un precoz amor adelantada,
joven y hermosa, dulce (aparente) criatura.
Experta molinera en andaduras;
apartabas la harina del salvado.
En un instante de amor lo vi muy claro...
al momento de iniciada la aventura.
Te sentí muy estudiosa en andaduras
y en aquella pereciera, a ti entregado.
Del encuentro, salí desesperado
en aquel alba: la primera amanecida.
Hoy no mendigo besos ni ternura
y se por eso que lo tuyo fue prestado.
Hoy me duele tu cuerpo, ali aplastado
al mío... y de la hierba percibo su frescura.
Pero tu cuerpo me quema, me tritura...
porque fuiste la paja y yo el grano.
No puedo evitar me grite aquel verano.
alentando mis ansias sucesivas.
Como me grita tu engaño... cuesta arriba
soy tan loco que aquel día aún reclamo.
Aún percibo tus cabellos, largos, largos,
y tus senos invitando a la caricia...
altivos que llamando me vencían:
Aún me veo en mi demencia a ti entregado.
Aún me veo demolido, destrozado:
reducida a escombros mi cordura,
aún te nombro de pasión en la locura;
echo añicos, extraviado, destrozado.
MONEDERO.
Que cosas tan bonitas escribes, Libertad, pero a éstos temas no hay necesidad de ponerle los antiguos rombos, éstos no necesitan de censuras, más habría que ponerlos a ciertas noticias que todos vemos, no por el mero hecho de ver, si no porque existen, ahí, si pondría yo censura, aunque censurar también es una palabra “fea” y trae malos recuerdos, en fin sigue así, escribiendo para todos los públicos y haciéndolo como lo haces de bien, ah y no te quejes de las torrijas, que cuesta mucho trabajo hacerlas jejeje.