Por si viene el grandullóon dejo las antorchas encendidas, tambien para todos los que os vais a descansar y necesitais tener claridad y tranquilidad, y para todos los que necesiten esa fuerza y energia para seguir luchando, para TODOS... TODOS... se quedan encendidas estas antorchas como cada noche
Hasta mañana amigos
Hasta mañana amigos
Buenos días Loli, no creo que ya te hayas marchado porque me parece recordar que dijo Enrique, hoy era algo más tarde cuando tenéis que viajar, que se de todo bién y no paseis mucho calor ya que parece por el momento que hace mas fresquito.
Ya que estamos en el verano, voy a rescatar de por ahí algo que escribí y hoy lo pongo de nuevo, que ya empiezan las verbenas en las noches de verano.
Besos y hasta luego.
PAISAJES DE UN VERANO
Admiraba al pintor que dibujaba
panoramas de veranos en un pueblo,
sus pinceles parecían tener alas
llenando de paisajes aquel lienzo.
Me llegaba el olor a paja seca
mirando los trigales agostados,
los segadores con hoces y cordetas,
y el carretero llevando yunta y carro.
Volvieron los recuerdos a mi mente
viviendo los veranos de mí pueblo,
las divertidas noches con mi gente,
los corros de vecinos en el fresco.
Y aquellas noches de baile, de verbena,
el chico aquel que tanto nos gustaba
a todas las amigas ¡vaya pena!
que él nunca en ninguna se fijaba.
Recordaba el rumor de las hojas
de los chopos en la verde alameda,
los trinos de las aves, contentas, ruidosas
y la siesta escuchando la nana cigarrera.
Sentí que la nostalgia me empujaba,
y marché a buscar allá en el pueblo
el verano que aquel pintor pintaba,
no encontré casi nada, solamente recuerdos
ENRIQUETA
Ya que estamos en el verano, voy a rescatar de por ahí algo que escribí y hoy lo pongo de nuevo, que ya empiezan las verbenas en las noches de verano.
Besos y hasta luego.
PAISAJES DE UN VERANO
Admiraba al pintor que dibujaba
panoramas de veranos en un pueblo,
sus pinceles parecían tener alas
llenando de paisajes aquel lienzo.
Me llegaba el olor a paja seca
mirando los trigales agostados,
los segadores con hoces y cordetas,
y el carretero llevando yunta y carro.
Volvieron los recuerdos a mi mente
viviendo los veranos de mí pueblo,
las divertidas noches con mi gente,
los corros de vecinos en el fresco.
Y aquellas noches de baile, de verbena,
el chico aquel que tanto nos gustaba
a todas las amigas ¡vaya pena!
que él nunca en ninguna se fijaba.
Recordaba el rumor de las hojas
de los chopos en la verde alameda,
los trinos de las aves, contentas, ruidosas
y la siesta escuchando la nana cigarrera.
Sentí que la nostalgia me empujaba,
y marché a buscar allá en el pueblo
el verano que aquel pintor pintaba,
no encontré casi nada, solamente recuerdos
ENRIQUETA
Ya lo tengo claro, me contaron y además he leído que la noche pasada estuvo fresquita, debisteis dormir placidamente y amanecisteis con gran inspiración, llevo rato queriendo ir a tender ropa y no veo el momento, ahora me encuentro éste paisaje de verano de Enriqueta, precioso Enriqueta, yo las noches de verbena, aunque ya me gustaría, no las recuerdo porque no las viví, pero el canto ó nana cigarrera si y lo que más claro me viene son esas tardes en una huerta de Villamayor, momentos felices con una familia que sentíamos nuestra, aunque no lo decían así nuestras documentaciones, pero como lo que cuenta son los sentimientos, estos me dicen, que aquella era mi tía Cipriana (Q. E. P. D.) y su hijo mi primo Juli, vecino vuestro por cierto, más cercano de Enriqueta, en éstos días está viviendo bonitos y felices momentos, ha sido abuelo por primera vez.