Yo los toros prefiero verlos desde la barrera jeje, un par de veces he ido a los de Almodovar y en el centro de la calle puedes verme hasta que les dan suelta, luego.... tras las tablas y con precaucion, a mi si viera a un hijo mio en esa situacion me pasaria como a ti, me daria un yu-yu o una de esas lipotimias que hubo ayer
Seguro te lo he contado, si no, ahora va la historia:
Siendo muy chiquilla, me llevó mi padre a Cabezarrubias a las fiestas, me dejó con sus primas y éstas, junto con sus novios y amigos me subieron por una escalera de madera, de éstas que apoyan en la pared y nos sentamos sobre un tablón, tipo andamio, pero escaso, de momento, sale el toro, se coloca bajo el tablón, a la sombra y todos los allí sentados se dedican a mover el tablón, ya no recuerdo más, solo se que el toro mugía de un modo que aún no he olvidado, en un momento, recuerdo que mis primas me gritaban, ¡ya, ya! Si el toro lo ha sacado tu padre de debajo, yo preguntaba ¿mi padre? por poco me vuelvo a quedar otra vez traspuesta.
Luego me contaron que mi padre desde lejos, me vió gritando desencajada y pidió un capote a Modesto Prado y a sacar al toro de debajo de mi se largó, claro que también iría Modesto Prado y alguno más, porque si el toro hace por mi padre, se harta de padre jejej, ahora me río, pero te aseguro que lo pasé mal y jamás volví a ver toros donde no fuera una plaza en regla, curiosamente en la de nuestro pueblo, solo he pasado para ver conciertos, (en la antigua si que fui mucho) pero como aún me queda mi parte taurina, esa que aprendí a querer desde chiquitina, no descarto presenciar una tarde de toros si los diestros son de mi preferencia. Por si acaso, no te molestes en buscarme cerca de ningún encierro, ni charlotada, de éstas, alguna vi de pequeña y por muy chica que era supe distinguir entre lo que me gustaba y lo que no.
Siendo muy chiquilla, me llevó mi padre a Cabezarrubias a las fiestas, me dejó con sus primas y éstas, junto con sus novios y amigos me subieron por una escalera de madera, de éstas que apoyan en la pared y nos sentamos sobre un tablón, tipo andamio, pero escaso, de momento, sale el toro, se coloca bajo el tablón, a la sombra y todos los allí sentados se dedican a mover el tablón, ya no recuerdo más, solo se que el toro mugía de un modo que aún no he olvidado, en un momento, recuerdo que mis primas me gritaban, ¡ya, ya! Si el toro lo ha sacado tu padre de debajo, yo preguntaba ¿mi padre? por poco me vuelvo a quedar otra vez traspuesta.
Luego me contaron que mi padre desde lejos, me vió gritando desencajada y pidió un capote a Modesto Prado y a sacar al toro de debajo de mi se largó, claro que también iría Modesto Prado y alguno más, porque si el toro hace por mi padre, se harta de padre jejej, ahora me río, pero te aseguro que lo pasé mal y jamás volví a ver toros donde no fuera una plaza en regla, curiosamente en la de nuestro pueblo, solo he pasado para ver conciertos, (en la antigua si que fui mucho) pero como aún me queda mi parte taurina, esa que aprendí a querer desde chiquitina, no descarto presenciar una tarde de toros si los diestros son de mi preferencia. Por si acaso, no te molestes en buscarme cerca de ningún encierro, ni charlotada, de éstas, alguna vi de pequeña y por muy chica que era supe distinguir entre lo que me gustaba y lo que no.
Si me lo habias contado, pero me ha gustado leer de nuevo esa anecdota, de la que ahora hacia gracia al contarla, pero en esos momentos, me imagino, uffff y mira que le echó valor tu padre, para que luego digan... hay que ver lo que un padre es capaz de hacer por un hijo, y ahi estuvo la prueba verdad, bueno ahora te sirve para recordarlo y reirte, esas son las cosas buenas de la vida, los recuerdos que de ella vamos guardando, pero sobre todo de los buenos recuerdos, yo tambien recuerdo haber ido de pequeña a ver corridas en la antigua plaza, pero en la nueva no, bueno ni en la nueva ni en ninguna, porque hace un par de años fuimos unos compañeros, un matrimonio iba a los toros en las ventas y yo preferi quedarme fuera y no pasar a verla, alguno mas me acompañó, a veces pienso que quizá me perdí un buen espectáculo, o ver la grandiosidad de la plaza, pero en esos momentos hice lo que sentí, preferi pasear y conversar con los amigos a pasar a los toros, en cuanto a los encierros, si he ido esas veces a Almodovar no es precisamente por los encierros, sino porque me habian invitado unos amigos a pasar el dia y comer con ellos, y claro coincidio dia de encierro y que pasaban por delante de donde estaba la peña, pero tampoco es algo que me apasione, supongo que a los que corren los encierros si les apasionara y lo viviran, yo para estar sobrecogida prefiero irme de tapeo por las casetas y pasear por el recinto ferial, pero bueno, no todos vamos a tener los gustos iguales ¿verdad?, seria aburrido