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Buena madrugada amigos, aqui os dejo las antorchas, os daran calor que falta hace, al menos a mi si que me viene bien, ya que tengo un constipado que no dejo de estornudar...
No os desarropeis ehhh que os podeis resfriar tambien, asi que a dormir, no ronqueis mucho para que vuestra pareja no os eche de la cama y tampoco los/las desarropeis...
Hasta mañana, felices sueños
No os desarropeis ehhh que os podeis resfriar tambien, asi que a dormir, no ronqueis mucho para que vuestra pareja no os eche de la cama y tampoco los/las desarropeis...
Hasta mañana, felices sueños
Buenos días amigos, soleado amaneció, pero al tiempo frío, no he salido aín a la calle, pero al abrir la ventana he notado que la temperatura es bastante baja.
Como hace bastante no os he mandado nada, hoy se me ha ocurrido poner algo que tengo hecho hace un tiempo, aunque luego lo rectifiqué y creo está enviado, el original que es este, me gusta y creo es más real; haber si os gusta.
EL REGALO
De nuevo el día llegó,
el viento se meció
y rozó los cristales,
la luz me saludó
y el mundo se llenó
De ruidos matinales.
El gorjeo de un gorrión,
el sonar del reloj
en la torre cercana,
el rayito de sol
que tímido pasó
cruzando la persiana.
Dí gracias otra vez
a Dios, por permitir
regalarme otro día
y poder disfrutar
con gran intensidad
de las cosas sencillas.
Vamos sumando días
al tiempo que quitamos hojas
de nuestro calendario, de la vida,
unas veces llorando, otras riendo,
unas veces ganando, otras perdiendo.
¡Menuda paradoja!
que según voy creciendo en días,
el calendario
vaya menguando en hojas,
cada momento un recuerdo vivido.
Y cuando caiga la última
al final del camino
invocaré a los vientos
para que ellos recojan
el último testigo.
ENRIQUETA
Como hace bastante no os he mandado nada, hoy se me ha ocurrido poner algo que tengo hecho hace un tiempo, aunque luego lo rectifiqué y creo está enviado, el original que es este, me gusta y creo es más real; haber si os gusta.
EL REGALO
De nuevo el día llegó,
el viento se meció
y rozó los cristales,
la luz me saludó
y el mundo se llenó
De ruidos matinales.
El gorjeo de un gorrión,
el sonar del reloj
en la torre cercana,
el rayito de sol
que tímido pasó
cruzando la persiana.
Dí gracias otra vez
a Dios, por permitir
regalarme otro día
y poder disfrutar
con gran intensidad
de las cosas sencillas.
Vamos sumando días
al tiempo que quitamos hojas
de nuestro calendario, de la vida,
unas veces llorando, otras riendo,
unas veces ganando, otras perdiendo.
¡Menuda paradoja!
que según voy creciendo en días,
el calendario
vaya menguando en hojas,
cada momento un recuerdo vivido.
Y cuando caiga la última
al final del camino
invocaré a los vientos
para que ellos recojan
el último testigo.
ENRIQUETA
