! Naturalmente que nuestro antepasados son a recordar!
A recordar, que la costumbre del hornazo, también se daba en mi pueblo, y puede que hasta continúe. Aún lo siento en el paladar. La última vez que lo gusté, descendía la empinada cuesta y solté las manos del manillar, me sorprendió una curva, y bicicleta, quien la montaba, y el trozo de hornazo salieron disparados, rompí un pedal y me hice 15 kilometros (creo que mas9 hasta Guadalajara, pedaleando con un solo pie.
La fiesta del Hornazo, se celebraba, el Lunes siguiente al Domingo de resurrección. Era costumbre de acudir chicos y chicas, con las tortillas y este dulce exquisito. tengo memoria de algunas en el nacimiento de agua mas abajo del lavadero. Uno de los lavaderos que data de mas de 500 años: hay dos.
Allí sobre las viejas piedras está grabado mi nombre, puesto que se me encargó de reparar algunas averías. Se me dijo que el año pasado una tormenta, lo invadió todo.
Quedan nosyalgias de aquellos momentos entrañables.
Abrazos.
A recordar, que la costumbre del hornazo, también se daba en mi pueblo, y puede que hasta continúe. Aún lo siento en el paladar. La última vez que lo gusté, descendía la empinada cuesta y solté las manos del manillar, me sorprendió una curva, y bicicleta, quien la montaba, y el trozo de hornazo salieron disparados, rompí un pedal y me hice 15 kilometros (creo que mas9 hasta Guadalajara, pedaleando con un solo pie.
La fiesta del Hornazo, se celebraba, el Lunes siguiente al Domingo de resurrección. Era costumbre de acudir chicos y chicas, con las tortillas y este dulce exquisito. tengo memoria de algunas en el nacimiento de agua mas abajo del lavadero. Uno de los lavaderos que data de mas de 500 años: hay dos.
Allí sobre las viejas piedras está grabado mi nombre, puesto que se me encargó de reparar algunas averías. Se me dijo que el año pasado una tormenta, lo invadió todo.
Quedan nosyalgias de aquellos momentos entrañables.
Abrazos.