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RECOGIMIENTO Y AVE MARÍA EN CALLE ADUANA
Cinco minutos antes de llegar a las diez de la noche la Virgen de Gracia se encaminaba en sentido ascendente por la parte baja de la calle Aduana, más estrecha, acompañada de cuarenta madrinas con mantilla negra y otros tantos hermanos de la Cofradía de Caballeros con riguroso traje azul y farol en mano que alumbraban a la patrona. También precedían a la patrona diversos miembros de colectivos religiosos, como la Archicofradía de María Auxiliadora, Cofradía de la Virgen de Gracia y Asociación Santa Gema. Un tramo de absoluto recogimiento y silencio antes de llegar al ensanche de la calle Aduana, en donde se congregaban cientos de personas para contemplar su paso por la alfombra mientras se escuchaba el Ave María y se lanzaban cientos de pétalos de claveles y rosas.
Cinco minutos antes de llegar a las diez de la noche la Virgen de Gracia se encaminaba en sentido ascendente por la parte baja de la calle Aduana, más estrecha, acompañada de cuarenta madrinas con mantilla negra y otros tantos hermanos de la Cofradía de Caballeros con riguroso traje azul y farol en mano que alumbraban a la patrona. También precedían a la patrona diversos miembros de colectivos religiosos, como la Archicofradía de María Auxiliadora, Cofradía de la Virgen de Gracia y Asociación Santa Gema. Un tramo de absoluto recogimiento y silencio antes de llegar al ensanche de la calle Aduana, en donde se congregaban cientos de personas para contemplar su paso por la alfombra mientras se escuchaba el Ave María y se lanzaban cientos de pétalos de claveles y rosas.