PUERTOLLANO: Se nota en tus escritos que todo está mejor, al menos...

COMO LA YEDRA...
Los brazos se ceñían como la yedra al árbol.
La yedra trepadora en amor se agarraba al tronco de la vida.
Lentamente o locamente, subir, trepar, alcanzar:
llegar a la cima
del amor y rezar amor hasta profundidades desconocidas.

Andaban, subían, bajaban manos sobre piel enamorada
y sobre colinas y valles que encendían la sangre...
savia del árbol de la vida.
! Ah las mariposillas del amor, que hermosas alas!
! Como buscan la flor entre las flores
desde hondos suspiros en sus gargantas!

Ella sobre el cespez desnuda y entregada
mientras relojes de viento acariciaban los robles.
En las profundidades del hermoso caos
ni se daban cuenta que el rió murmuraba cantares
en el vado
y que en los árboles se amaban aves.

Ya no respiró la tarde tristeza,
ella rebelde y ligera
ruidosa y juvenil, y bella muy bella
se acercó aprisa por la senda,
bajo un cielo que escribía promesas.
Y la brisa.
Y la hierba
que gemía...
y ella
cuando casi con furor le arranco su falda
y el grito del amor estalló en la pradera.

La tarde se marchaba.
El viento repartía olor a rosas
y un poco llanto de dalia
goteó en ella.

El sol lucía su ultimo vals, por el poniente
cuando los dos pensaban en el viento que enamora.
libertad.

Se nota en tus escritos que todo está mejor, al menos tienes ganas de ponerte en el ordenador y las musas vuelven a acompañarte cuando hasta tu rincón subes y te decides a emborronar cuartillas

Abrazos, en este caso solo para ti jejej