No con dos flores, sino con mil, quisiera hoy, alumbrar a todos los tristes... muy en particular a los ausentes.
Decir que tengo hoy tres temas, dos agrios, y otros, dulces como el almíbar... dulces como el amor. Pero de esto: de el amor, hablaré tal vez mas tarde en mi pueblo. o bien en Viego donde (me perdonen) les tengo abandonados. de lo agrio, permitid que elija la hora y el lugar. Con un! Buen día para todos! muy en, especial para quien ceñída a su promesa y dolida, no dudo, levante su decaido estado de ánimo.
FUE AQUEL DÍA...
I
Fuera en el río aquel...
entre los álamos
chorreaba en la tarde
el piar alegre de los pájaros.
Y saltaban; Y saltaban: saltaban.
Felices: piando, piando
saltaban de rama en rama.
En silencio, embelesados...
-la brisa despertaba:
contemplando, mirando
el hermoso cielo azul
allá en lo alto:
pintara en tí, mis mil caricias
aquella tarde de verano.
II
Quisiera despertarte de tu tristeza.
Quisiera, que tomaras hoy mi mano.
Quisiera, que cantaras... que tu pena
se alejara con la canción de aquel verano.
Es por eso que esta mañana serena
me despierto y te canto: y te canto...
III
Me despierto en ti muy pronto.
me despierto en ti temprano:
tus ojos para mis ojos,
tus labios para mis labios...
y te beso, y te doy todo
en silencio, muy despacio.
Te amanezco, pronto
para tomar tu mano.
para tenerla apretada,
feliz y enamorado.
para cantarte luego,
despacio, muy despacio,
mil veces, mucho tiempo,
la canción de aquel verano.
LIBERTAD
Decir que tengo hoy tres temas, dos agrios, y otros, dulces como el almíbar... dulces como el amor. Pero de esto: de el amor, hablaré tal vez mas tarde en mi pueblo. o bien en Viego donde (me perdonen) les tengo abandonados. de lo agrio, permitid que elija la hora y el lugar. Con un! Buen día para todos! muy en, especial para quien ceñída a su promesa y dolida, no dudo, levante su decaido estado de ánimo.
FUE AQUEL DÍA...
I
Fuera en el río aquel...
entre los álamos
chorreaba en la tarde
el piar alegre de los pájaros.
Y saltaban; Y saltaban: saltaban.
Felices: piando, piando
saltaban de rama en rama.
En silencio, embelesados...
-la brisa despertaba:
contemplando, mirando
el hermoso cielo azul
allá en lo alto:
pintara en tí, mis mil caricias
aquella tarde de verano.
II
Quisiera despertarte de tu tristeza.
Quisiera, que tomaras hoy mi mano.
Quisiera, que cantaras... que tu pena
se alejara con la canción de aquel verano.
Es por eso que esta mañana serena
me despierto y te canto: y te canto...
III
Me despierto en ti muy pronto.
me despierto en ti temprano:
tus ojos para mis ojos,
tus labios para mis labios...
y te beso, y te doy todo
en silencio, muy despacio.
Te amanezco, pronto
para tomar tu mano.
para tenerla apretada,
feliz y enamorado.
para cantarte luego,
despacio, muy despacio,
mil veces, mucho tiempo,
la canción de aquel verano.
LIBERTAD