PUERTOLLANO: Hablas de noche oscura y leyéndote se iluminó más el...

Era una noche oscura y vacía: una de estas noches en que el misterio de la imaginación alumbra en el deseo de un amor resplandeciente. Una de esas noches. en que los parque se iluminan de albas de amor y sobran las palabras. Una noche en la que se desea se abra una puerta a una naciente madrugada... En el pensamiento, las puertas del amor permanecen abiertas, aún que fuertes rejas lo impidan. Triunfa el pensamiento: Triunfa el corazón y alumbra jardines en la oscuridad: jardines inalcanzables, pero jardines relucientes. jardines. Oasis. adenes donde posar, nacientes deseos, que vuelan hacia algún lugar y se posan sobre una nueva flor naciente. Y a la par van brotando estrellas embelleciendo la noche, vistiendo de magia el instante. Y si te abraza el empeño, pintas de besos el cielo y los envuelves en flores, y los envías, allá donde el corazón late en ese instante que no desees termine.
No estoy seguro, si estoy solo o en la noche invisibles moradores me envuelven en una especie de viento musical. ¿Hay moradores, duendes en la noche? ¿Es la magia de un naciente deseo? ¿Estoy murmurando palabras de amor en algún oído. a una figura aparecida en las sombras? Sea como fuere... ella está AHÍ, y cojo de mi mano la suya frágil, suave delicada. Ya, solo este contacto, acelera los latidos de mi corazón, que no logra acallar el murmullo de las olas. Y la mano frágil... la mano delicada, la mano que transmite, me conduce hacua las aguas, que vierten sobre la arena besos de espuma. Y avanzo, con ella, caminando mar adentro. Y participo de su risa y de sus palabras, entre las olas, y me dejo reconducir mar adentro, hacia el mar de el amor. Y me extravío. Y busco un madero para no hundirme en las profundidades, cuando la mano suelta mi mano... pero emerjo, floto de nuevo: ALLÍ estas tu.
Allí estas TU en la magia, en lo desconocido que me ofreces. Allí estás tu:
Allí estás tu, como nunca, reflejada con la luna enamorada de el instante. Has acudido de nuevo a mi angustiosa llamada. y me dibujas besos de estrellas. Y lejos muy lejos se va quedando la bahía, y aquel mortal triste, ríe contigo. y se asoma a la misma luna que alumbra tu cara Confidente la Luna, que en ese momento, borra algunas estrellas, para convertirlas en flores que te envía desde mi pensamiento. a la vez que forja una escalera de colores. Y. al final alcanzamos la Luna... que sonríe halagada.
Allí estas tú. Allí estamos los dos, mirándonos abrazados. en la magia de el instante. Y se alumbran las aguas de flores de colores. Y la Luna de alguna parte hace sonar arpas que esparcen sobre las aguas, las notas musicales, mas bellas jamás escuchadas.
Y te ríes sin cesar... Y percibo que tu risa, aleja muchas lágrimas de tristeza. Yo no te pregunto nada... solo quiero borrar para siempre tus lágrimas tristes...
De pronto-amarga sensación- se rompe el hechizo. ¿O tal vez no de el todo?-me pregunto, ya, solo, muy solo en medio de el mar, y en un mar de dudas. Pero tu risa se ha borrado. Tu sonrisa se pierde mar adentro. Tu hermosa figura desaparece, y a mi alrededor ya no hay flores ni nada. Unas algas se enredan en mis pies desnudos. Se burlan las olas de mi soledad. Se apagan las estrellas. palidece la Luna. Unas nubes negras, caminan deprisa sobre el cielo de la bahía. Extiendo mis manos, hasta tu borrosa figura. Yo extendí mis brazos hacia ti. te llamaba a voces. Te gritaba:! no me dejes!, Pero viera tus manos dibujando un adiós que se me antojaba definitivo.! Ven a mi!- te repetía. y los ecos de mis gritos desesperados, solo eran ecos en los acantilados, como burlándose de mi desesperación
Miraba desolado mis manos: las manos que te habían acariciado estaban vacías. Di unas vueltas sobre mi mismo para convencerme de que ya no estabas...
Caminé hasta los matorrales cercanos y ya en el sendero,, me vi murmurando: Volveré. Volveré mi linda "sirenita". Volveré para convencerme de que no ha sido un sueño. Volveré a el mar y sus acantilados: te buscaré por todos los senderos de el bosque en noches de Luna o sin ella. Descolgaré todas las estrellas alumbradas de mi amor. para que regreses, otra vez aunque solo sea un instante. En el amor, siempre hay un se iluminará un sendero donde caminar... soñando o despierto.
(ES POSIBLE QUE CONTINUÉ)
LIBERTAD.

Hablas de noche oscura y leyéndote se iluminó más el día, lo primero que hice, fué copiar y guardar, después, con calma he leído y ahora decirte me ha gustado, seria poco, por eso, solo digo espero la continuación, gracias por lo generoso que eres al dejarnos éstos escritos. Que tengas una feliz celebración, ya me has dicho que hoy harás doblete, pues que lo disfrutes.