ROSARIO DE LA AURORA
He de confesar que algunos aquella mañana madrugaron, yo también pero menos, unos amigos y amigas asistieron al Rosario de la Aurora, otros solo pensábamos en el desayuno.
Una vez finalizados los actos religiosos, nos reunimos todos y después de los clásicos besos y abrazos con sus correspondientes risas, decidimos ir a tomar chocolate con churros.
¡Hay los churros! Bueno la forma la tenían, también aceite hasta de más, de la dureza mejor no comentamos, verdad amigos.
Omitiremos el nombre de la churrería de momento, pero con los años que llevan haciéndolos, creo que va siendo hora que se esmeren en el punto de fritura.
El caso es que los 7 asistentes a tan magno acontecimiento, nos reímos a mandíbula suelta, y disfrutamos de un desayuno placentero, bueno si olvidamos el detalle de los churros.
Unas fotografías para inmortalizar el encuentro, un par de chistes, que por cierto uno de ellos fue el desencadenante de una gran carcajada y en definitiva un maravilloso desayuno.
He de confesar que algunos aquella mañana madrugaron, yo también pero menos, unos amigos y amigas asistieron al Rosario de la Aurora, otros solo pensábamos en el desayuno.
Una vez finalizados los actos religiosos, nos reunimos todos y después de los clásicos besos y abrazos con sus correspondientes risas, decidimos ir a tomar chocolate con churros.
¡Hay los churros! Bueno la forma la tenían, también aceite hasta de más, de la dureza mejor no comentamos, verdad amigos.
Omitiremos el nombre de la churrería de momento, pero con los años que llevan haciéndolos, creo que va siendo hora que se esmeren en el punto de fritura.
El caso es que los 7 asistentes a tan magno acontecimiento, nos reímos a mandíbula suelta, y disfrutamos de un desayuno placentero, bueno si olvidamos el detalle de los churros.
Unas fotografías para inmortalizar el encuentro, un par de chistes, que por cierto uno de ellos fue el desencadenante de una gran carcajada y en definitiva un maravilloso desayuno.
Vamos a ser sinceros, lo mejor fueron los asistentes, para que nos vamos andar con excusas ni justificaciones, pero cuando un grupo de amigos se reúnen, lo de menos es lo que haya sobre la mesa y si en los sentimientos, es, o no es? pues eso, dejemos pues, el chocolate y los churros, porque lo que buscábamos era un sitio donde sentarnos todos con calma y donde no estuviéramos abarrotados, recuerdo una expresión que dijo Maxi para dejar de ir en una dirección, pero no la repetiré jeje, lo pasamos bien, reímos y eso que ni me acuerdo del chiste, o si? No se, no se, a gusto estábamos, tanto que casi nos radian de tarde que terminamos, poco más nos llega la hora de la comida.
Como que no te recuerdas del chiste, aquel de Sara manca y Sara goza, bueno que no hice fotos porque tenía la cámara en casa y por no subir los 4 pisos lo deje a vuestra libertad.
Cierto es que los asistentes estábamos a gusto, lastima la hora…..
Cierto es que los asistentes estábamos a gusto, lastima la hora…..
¿La hora? si el único que llevaba ojeras eras tú jejejeje, que conste que has sido tú quien lo ha dicho. Fíjate, ni aún con los nombres recuerdo el chiste..... pero déjalo, no lo cuentes, intentaré hacer memoria, que ya has dado muchas pistas, casi, casi, como aquél personaje de Ángel Garó.