Señora de la fé, patrona de Solanilla, tus devotos te llevan a hombros, entre aplausos y vivas. Eres la madre de todos y te veneran y aclaman, delante marchan las andas, detras, promesas y almas. Romeros cantan unísomo, los rezos de amor y fé, devotos se manifiestan y lloran cuando te ven. Patrona de Solanilla, reina y madre de amor, tus hijos te aclaman, con orgullo y devoción. Cierto año en romería hacia la localidad, una persona subida de moral y algo ebrio, comentaba durante el recorrido: Mafifé, este año pesas más, has engordado demasiado y con ligero, es decir, demasiado ligero baiben, insistía en ser él, quien portase la imagen en hombros, provocando risas y anécdotas en el resto. Se preserva la privacidad del sujeto.