Podemos observar el estrecho de la hoz, una maravilla de la naturaleza, introducirse dentro de él, es toda una experiencia grata pero a su vez temeraria, si no se va acompañado por alguien conocedor del lugar. En su entrada norte, donde antes han confluido los ríos Robledillo y río frio, que conforman el Jándula, hay vestigios paleolíticos y dentro del mismos en su margen derecha, representación del arte rupestre esquemático del Calcolítico Bronce. Su fauna y flora es abundante y sus cuevas de cuarcita por desprendimiento de la misma son impresionantes. Si eres osado y te gusta la naturaleza, visitaló, pero procura que te acompañe alguien de lugar, así evitaras sorpresas innecesarias.