TAMARAL
En la ladera con peñas
te encuentras tú, Tamaral,
con cuatro casas bien puestas,
los huertos y el corral.
Los buitres de ti observan,
las ovejas al pastar,
y las águilas que merodean
las gallinas del corral.
Tus gentes aunque escasas,
se alegran al despertar.
El gallo canta la hora,
la chicharra lo hizo ya.
Los perros ladran de continuo,
los gatos al maullar,
los viejos se acuestan pronto,
para poder madrugar.
Y dirigirse a sus huertos,
donde tienen que regar.
La plaza es testigo del arte
del bien estar,
las chirigotas contadas,
alegran a los que están.
En la ladera las peñas,
Te encuentras tú, Tamaral,
sencillo, humilde y bello,
te muestras a los demás.
En la ladera con peñas
te encuentras tú, Tamaral,
con cuatro casas bien puestas,
los huertos y el corral.
Los buitres de ti observan,
las ovejas al pastar,
y las águilas que merodean
las gallinas del corral.
Tus gentes aunque escasas,
se alegran al despertar.
El gallo canta la hora,
la chicharra lo hizo ya.
Los perros ladran de continuo,
los gatos al maullar,
los viejos se acuestan pronto,
para poder madrugar.
Y dirigirse a sus huertos,
donde tienen que regar.
La plaza es testigo del arte
del bien estar,
las chirigotas contadas,
alegran a los que están.
En la ladera las peñas,
Te encuentras tú, Tamaral,
sencillo, humilde y bello,
te muestras a los demás.