Y lo digo Juán, porque nos hemos quedado tu y yo solos en el foro. Como el pueblo que se está quedando sin habitantes, así se ha quedado el foro del Tamaral. Aquí no hay nadie que escriba sus comentarios y de esta manera esto parece un monólogo entre tu y yo. Este verano he estado en el pueblo y salvo en las fiestas de San Antonio, he visto a poca gente por el pueblo. Por unas cosas u otras, la gente es más reacia a acercarse a él. Ya sea porque el chiringuito ya no abre en verano, ya sea porque la gente le gusta más irse a otros lugares. El caso es que sales a la calle y no ves a nadie. Sólo se va a gente cuando viene el frutero de San Lorenzo o cuando viene el señor de los Quesos. Es muy triste, pero es la realidad pura y dura de nuestro pueblo. Y creo que esto va de mal en peor. Ya no va la gente ni al bar. El mes pasado los únicos que lo pisábamos eramos los que íbamos a jugar una partida de mus. Ya no hay ni jugadores de truque en el bar. Y en cuanto al foro, pues ya se ve quienes son los que lo utilizan, el barbas y yo. Seguro que en facebook y Twiter escribe todo el mundo, aquí nadie. Un abrazo para todos los Tamaraleños.
Estimado Jose Luis: Ciertamente es triste la falta de participación en este foro, de igual forma que lo es la falta de gente en las calles del pueblo. Sin embargo, y en cuanto al foro se refiere, creo que es más triste aún el contenido de algunos de los últimos mensajes que se han publicado, que lejos de ser constructivos, interesantes o de mera divulgación, se centran en tirarse ladrillos a la cabeza sobre tiempos pretéritos, y que dejan patente y sin ocultación rencillas sobre gestiones de hermandades (por ejemplo), y que, en realidad, y en mi modesta opinión, lejos de invitar a la participación creo que invitan a la deserción.
Ya vendrán tiempos mejores para el contenido del foro, espero, pero, no obstante, creo la forma agresiva, descalificadora y desde luego poco respetuosa de muchos de los comentarios que pueden verse en el foro, invitan poco o nada a la participación.
Fijate cuan poco tiempo tardan los comentarios sobre la actualidad pólítica en convertirse en verdaderas palestras de lucha y enfrentamiento, donde enseguida abandonamos el comentario general y abstracto, y lo hacemos particular y causa personal, y enseguida la afrenta personal sustituye a la mera opinión política, vertida sobre la pura actualidad diaria.
Cuando se insetan artículos de opinión y ciencia, de reflexión personal y de filosofía existencial, aparecen comentarios que critican duramente a quien los emite, tachándolos miserablemente de rollazo, de petardo, y de carga insoportable.
Así, estimado José Luis, creo que estarás de acuerdo conmigo en que el Foro es sin lugar a dudas poco atractivo, y creo, que a la realidad me remito. De ahí el decaimiento por escribir, de ahí la desidia emocional, y de ahi, creo, la pereza de teclear, aunque fuera breve y conciso, sabiendo lo que por aquí habita. Es una opinión personal, lanzada sin ánimo de confrontación, ni de ofender a nadie.
Ya vendrán tiempos mejores para el contenido del foro, espero, pero, no obstante, creo la forma agresiva, descalificadora y desde luego poco respetuosa de muchos de los comentarios que pueden verse en el foro, invitan poco o nada a la participación.
Fijate cuan poco tiempo tardan los comentarios sobre la actualidad pólítica en convertirse en verdaderas palestras de lucha y enfrentamiento, donde enseguida abandonamos el comentario general y abstracto, y lo hacemos particular y causa personal, y enseguida la afrenta personal sustituye a la mera opinión política, vertida sobre la pura actualidad diaria.
Cuando se insetan artículos de opinión y ciencia, de reflexión personal y de filosofía existencial, aparecen comentarios que critican duramente a quien los emite, tachándolos miserablemente de rollazo, de petardo, y de carga insoportable.
Así, estimado José Luis, creo que estarás de acuerdo conmigo en que el Foro es sin lugar a dudas poco atractivo, y creo, que a la realidad me remito. De ahí el decaimiento por escribir, de ahí la desidia emocional, y de ahi, creo, la pereza de teclear, aunque fuera breve y conciso, sabiendo lo que por aquí habita. Es una opinión personal, lanzada sin ánimo de confrontación, ni de ofender a nadie.