Estos que se prometian salvar este país, que proclamaban a los cuatro vientos que ellos sabian hacer bien las cosas, que habian superado una crisis y que volverian a hacerlo, no nos contaron, que su plan era destruir la sanidad pública, que su plan era, cargarse la dignidad de los trabajadores y sus pocos derechos, que su plan era desmantelar el estado de bienestar en su totalidad, que su plan era dejar en la ruina y la mayor miseria social a las familias, que su plan era ser los lacayos de Europa y los mercados, que su plan era, que viviesemos de rodillas para suplicar limosna y sentirnos privilegiados, que su plan era aumentar el desempleo y hacer del trabajo ligeramente digno una psicosis del miedo permanente, que su plan era que las familias no tuviesen estabilidad social y moral, que su plan era que los bancos, si los culpables de nuestra miseria social, fuesen protegidos, beneficiados y respaldados, que su plan era sobre todo, que sus robos y malversaciones fuesen legales y ocultadas para beneficio de ellos y sus allegados. Si esos salvadores, que se prometian, tan solo son cuatreros legales de una democracia, que ellos y los otros, han convertido en la preocupación y hazmerreir de todos los que nos observan. Vallanse, indignos, para ser mas dignos.