Nosotros, mi mujer y yo, nos sentimos ligados desde siempre con esta localidad. Hemos pasado muchos momentos buenos y compartimos ambos, con más personas la labor de la fiesta de la patrona. Ella sufrío, el no poder estar juntos en los momentos necesarios, las críticas y sacrificios, pero todo se llevó de la mejor manera y dejamos elementos personales aparte, para atenderla y poder sacar partido en beneficio del colectivo. Hoy, las circunstacias, hacen que estemos más desligados de la celebración, pero si deseamos que las personas que se hicieron cargo luchen por su continuidad, entendiendo que es una labor no fácil, por la falta de personal y aportaciones económicas.