Al observar esta
fotografía, no puedo dejar de acordarme de Antonio Rasero Paz, natural de esta localidad, actualmente fallecido. recuerdo como me refería anécdotas de su tierra, de su deliciosa
agua agria, de los vecinos y familiares. Era una persona muy apreciada por mi, que sin estudios ningunos alcanzó valores sociales y personales muy meritorios. En su trabajo era único, marcó tiempo y
historia. Todavía se funciona con sus nombres y son tan funcionales y prácticos que perduraran durante mucho tiempo en la historia de Repsol. Mi Rase, como te llamabamos muchos, que tus paisanos sepan de tí y de tu valor personal, que tu cuerpo y alma ocupen el lugar que merecias, nunca te olvidare, descansa en paz para siempre.