Los peces celebraron consejo y al fin decidieron trasladarse al otro estanque, y así se lo comunicaron a la cigüeña, quien emprendió el primer viaje con la trucha tuerta.
Al llegar junto al estanque, en vez de tirar la trucha al agua, el ave la mató de un picotazo y se la comió con gran apetito, tirando las espinas al pie de un árbol.
Cuando hubo terminado con la primera trucha, regresó al estanque diciendo:
Al llegar junto al estanque, en vez de tirar la trucha al agua, el ave la mató de un picotazo y se la comió con gran apetito, tirando las espinas al pie de un árbol.
Cuando hubo terminado con la primera trucha, regresó al estanque diciendo: