¿tienes un bar?

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

Vuelve parvas
Foto enviada por eufra7dos@hotmail.com

Los peces celebraron consejo y al fin decidieron trasladarse al otro estanque, y así se lo comunicaron a la cigüeña, quien emprendió el primer viaje con la trucha tuerta.
Al llegar junto al estanque, en vez de tirar la trucha al agua, el ave la mató de un picotazo y se la comió con gran apetito, tirando las espinas al pie de un árbol.
Cuando hubo terminado con la primera trucha, regresó al estanque diciendo:
El ave cogió con todo cuidado a la trucha y la llevó a que viese el magnífico estanque. Después la devolvió con sus compañeras, a las cuales explicó que la cigüeña había dicho verdad al describir el estanque.
Estas palabras convencieron algo a los peces, quienes delegaron a uno de ellos para que hiciera el viaje en el pico de la cigüeña. Era una trucha vieja y tuerta, que había demostrado en mil ocasiones que era suficientemente capaz de salir por sí misma de cualquier apuro.
-Estáis muy equivocados; ni por un momento se me ha ocurrido comerme a ninguno de vosotros. Si queréis, puedo llevar a uno de vosotros a que vea el estanque tan hermoso que hay a pocos pasos de aquí. Si vuelve con vida será señal de que no quiero causaros daño alguno.
-No estaría mal si fuese verdad, pero las cigüeñas tenéis la mala costumbre de comeros a los peces, y ya comprenderéis que no vamos a exponernos a perder la vida.
-Hay una solución muy sencilla. Si queréis os llevaré a un estanque que hay cerca de aquí. Es un estanque muy profundo y está lleno de flores de loto. Puedo cogeros uno por uno, con el pico, y trasladaros a ese lugar.
- ¿De veras? ¿Y qué es lo que piensas?
-Pues me decía que en este estanque hay muy poca agua y por lo tanto muy poca comida, por lo cual muchos de vosotros no tendréis apenas qué llevaros a la boca.
-Eso que dices es verdad -contestó un viejo barbo-. Pero ¿qué solución puede haber a un problema semejante?
Mientras buscaba la solución el problema, acercóse al estanque y se sentó a su orilla.
Al cabo de un rato, los peces, extrañados de verla allí, le preguntaron en qué pensaba.
-En vosotros -contestó el ave.
-Es necesario que encuentre la manera de engordar a esos peces y convertirlos en mi comida.
LA CIGÜEÑA CRUEL Y EL CANGREJO LISTO

En un espeso bosque había un pequeño estanque lleno de truchas. Como la estación era muy calurosa y el río que vertía sus aguas en el estanque muy poco caudaloso, pronto los peces se encontraron con que el lugar les resultaba bastante incómodo.
Una blanca cigüeña que les estaba observando se dijo: