¿tienes una peluquería?

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

El chorlito
Foto enviada por eufra7dos@hotmail.com

Rosario a la Virgen Guadalupana

En estos misterios se medita en las apariciones de la Virgen de Guadalupe. Al iniciar cada misterio, se lee el pasaje y se hace la petición, se reza un Padrenuestro, 10 Avemarías y un Gloria y al final, se canta alguna estrofa de las canciones propias de la Virgen de Guadalupe.

Primer Misterio: La Virgen de Guadalupe trae un mensaje de paz a su pueblo.
“Sabe y ten entendido, tú, el más pequeño de mis hijos, que soy yo la siempre Virgen Santa María, Madre del ... (ver texto completo)
Himno a la Virgen de Guadalupe

Mexicanos volad presurosos del pendón de la Virgen en pos, y en la lucha saldréis victoriosos defendiendo a la patria y a Dios.
De la santa montaña en la cumbre apareció como un astro María ahuyentando con plácida lumbre las tinieblas de la idolatría.
Es patrona del indio, su manto al Anáhuac protege y da gloria; elevad mexicanos el canto, alabanza y eterna victoria.
En Dolores brilló refulgente cual bandera su imagen sagrada dando arrojo al patriota insurgente ... (ver texto completo)
Canciones guadalupanas

La Guadalupana

Desde el Cielo, una hermosa mañana (bis)
La Guadalupana (tres veces) bajó al Tepeyac.
Suplicante juntaba sus manos (bis) y eran mexicanos (tres veces) su porte y su faz.
Su llegada llenó de alegría (bis)
De luz y armonía (tres veces) el Anáhuac.
Junto al monte pasaba Juan Diego (bis) ... (ver texto completo)
Las peregrinaciones no sólo se llevan a cabo en México, las hay en todos los países del mundo a diferentes templos. Algunas personas van de rodillas, porque le hacen una promesa a la Virgen cuando le piden un favor. En las peregrinaciones, la gente va haciendo oración, sacrificios y cantando. Muchas veces, las peregrinaciones vienen de muy lejos y se tardan varios días en llegar a darle gracias a la Virgen por algún milagro o favor que les concedió. El amor a la Virgen es lo que mueve a todas estas ... (ver texto completo)
Miles de personas de México y del mundo entero, visitan cada año la Basílica de Guadalupe, en donde está la hermosa pintura que la Virgen pintó a Juan Diego en su ayate para pedirle a Nuestra Madre su amor, su protección y su ayuda.
•En 1754, Benedicto XIV nombró a al Virgen de Guadalupe patrona de la Nueva España, desde Arizona hasta Costa Rica.
•El 12 de octubre de 1895 se llevó a cabo la coronación pontificia de la imagen, concedida por León XIII.
•En 1904, San Pío X elevó el santuario de México a la categoría de Basílica y en 1910 proclamó a la Virgen de Guadalupe, Patrona de toda América Latina.
•En 1945, Pío XII le dio el título de la Emperatriz de América. El 12 de Octubre de 1976 se inauguró la nueva Basílica de Guadalupe.
El ayate permaneció un tiempo en la capilla del Obispo Fray Juan de Zumárraga. El 26 de diciembre de 1531 lo trasladaron a una ermita construida al pie del Tepeyac.
Fue entonces cuando el Obispo creyó que la Virgen quería que le construyeran en ese lugar un templo.
Al soltar su ayate, las rosas cayeron al suelo y apareció dibujada en la tela la preciosa imagen de la Virgen de Guadalupe.
Juan Diego fue de nuevo a ver al Obispo y le dijo que la Virgen le había mandado la prueba de que Ella era realmente la Virgen.
Juan Diego no pudo ir al día siguiente al Tepeyac, pues su tío Bernardino se puso muy enfermo y fue por un médico. Fue hasta el martes, cuando al pasar por el cerro para ir por un sacerdote que confesara a su tío, se le apareció la Virgen y le dijo: "Juanito, Juan Dieguito; ¿No estoy yo aquí que soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿Por qué te preocupas?”. Después, le hizo saber que su tío ya estaba curado y le pidió que subiera a la punta del cerro a cortar unas rosas y las guardara en su ayate. ... (ver texto completo)
La Señora le dijo a Juan Diego que volviera el domingo a casa del Obispo. Esta vez, el Obispo le dijo que le trajera una señal, es decir, una prueba de que la Señora de verdad era la Virgen.
Juan Diego salió de la casa del Obispo muy triste porque no le creyó. Entonces fue al Cerro del Tepeyac a pedirle a la Virgen que mejor mandara a un hombre más importante porque a él no le creían.
La Virgen le dijo a Juan Diego que fuera a ver al Obispo y le contara lo que Ella le había dicho.
La Señora le dijo: "Yo soy la siempre Virgen Santa María, Madre del verdadero Dios. He venido hasta aquí para decirte que quiero que se me construya un templo aquí, para mostrar y dar mi amor y auxilio a todos ustedes".