También podemos recordar aquello que dice: "La Primavera, la sangre altera".
Y también escribir esta poesía de José Cadalso.
A LA PRIMAVERA.
No basta que en su cueva se encadene
el uno y otro proceloso viento,
ni que Neptuno mande a su elemento
con el tridente azul que se serene;
ni que Amaltea el fértil campo llene ... (ver texto completo)
A LA PRIMAVERA.
No basta que en su cueva se encadene
el uno y otro proceloso viento,
ni que Neptuno mande a su elemento
con el tridente azul que se serene;
ni que Amaltea el fértil campo llene ... (ver texto completo)