Un día fui a visitar a una amiga mía y la encontré dando de comer a su hijo pequeño. Observé que tan pronto ella le metía en la boca una cucharada, el pequeño escupía la payor parte del alimento que ella le había introducido. Pacientemente, ella se limpiaba la comida de la barbilla y volvía a introducírsela. Tal procedimiento se repitió una y otra vez, en medio de tosesy arcadas del niño. Por fin, le pregunté:
- ¿Cómo puedes saber cuándo ha comido lo suficiente?
- Es muy sencillo -contestó-: doy ... (ver texto completo)
- ¿Cómo puedes saber cuándo ha comido lo suficiente?
- Es muy sencillo -contestó-: doy ... (ver texto completo)
Un maestro de escuela explicaba que al pedir a sus alumnos que escribieran una composición de no más de cincuenta palabras sobre la experiencia, un muchacho de quince años escribió: "Experiencia es lo que nos queda después de que hemos olvidado su nombre".