El amplio ático con el que termina la fachada, oculta, desde la plaza, la vista del tejado. En el centro hay un remate, a modo de peineta, que culmina con la figura de un león.
La fachada posterior, que se asoma a la calle Alfonso VIII, está compuesto con más claridad, y su ritmo es más clásico. Se articula en tres calles, con balcones en la planta noble y ventanas a eje en la superior.
Las puertas, que están situadas bajo el pórtico, son de traza muy sencilla y muestran cierta relación con la ... (ver texto completo)
La fachada posterior, que se asoma a la calle Alfonso VIII, está compuesto con más claridad, y su ritmo es más clásico. Se articula en tres calles, con balcones en la planta noble y ventanas a eje en la superior.
Las puertas, que están situadas bajo el pórtico, son de traza muy sencilla y muestran cierta relación con la ... (ver texto completo)