TIEMPO SIN TIEMPO.
Una vecina mía estaba en su jardín, cuando una amiga suya pasó por la calle y se pusieron a charlar. Más de una hora después, dice que se despidieron por fin, y cuando entr mi vecina en su casa, su hijo le preguntó por qué no la había invitado a pasar a tomar un café.
Mi amiga le dijo que sí la había invitado, pero que le había dicho que no tenía tiempo. ¡Cosas de mujeres!
Una vecina mía estaba en su jardín, cuando una amiga suya pasó por la calle y se pusieron a charlar. Más de una hora después, dice que se despidieron por fin, y cuando entr mi vecina en su casa, su hijo le preguntó por qué no la había invitado a pasar a tomar un café.
Mi amiga le dijo que sí la había invitado, pero que le había dicho que no tenía tiempo. ¡Cosas de mujeres!