Con esta poesía que Santa Teresa de Jesús dedicó a Santa Cecilia, quiero saludar y felicitar a los músicos y cantantes de todos los tiempos. ¡Viva la música!
«Mientras sonaban los órganos,
Cecilia cantaba en su corazón»
(Oficio divino)
¡Oh santa del Señor, yo contemplo extasiada
el surco luminoso (1) que dejas al pasar;
aún me parece oír tu dulce melodía
y hasta mí llega tu celeste canto.
De mi alma desterrada escucha la plegaria, ... (ver texto completo)
«Mientras sonaban los órganos,
Cecilia cantaba en su corazón»
(Oficio divino)
¡Oh santa del Señor, yo contemplo extasiada
el surco luminoso (1) que dejas al pasar;
aún me parece oír tu dulce melodía
y hasta mí llega tu celeste canto.
De mi alma desterrada escucha la plegaria, ... (ver texto completo)