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ALCONCHEL DE LA ESTRELLA (Cuenca)

El tejado de paja
Foto enviada por cuenka

A los días de navegación, una gran ola hizo naufragar el barco y Gulliver se encontró solo en medio del agua.
Era alto y fuerte; se pasaba el día comiendo, por eso crecía tan sano. Una tarde en el puerto hablo con el capitán de un gran velero mercante y se hizo a la mar.
Gulliver en Liliput

Gulliver siempre estaba pensando en correr aventuras.
Era huérfano y trabajaba en una herrería.
Mientras entran en clase, Cristina choca sin querer con otra niña que, al mirársela, toda enfadada, le dice:

- ¡Ep! Vigila, que con esta esponja gigante que tienes por pelo ¡no pasamos las dos a la vez!
Del encontronazo, a la niña se le cae un muñequito que llevaba en el bolsillo, pero no se da cuenta. Cristina la deja pasar sin contestarle, pero empieza a estar harta de tanta bromita...
La clase continúa y aún le faltan algunas más, pero Cristina no tiene ganas de pelearse con nadie. Sólo ... (ver texto completo)
- ¿Y mi goma? El niño de las pecas ha perdido la goma de borrar. Buscan y buscan, pero la goma no aparece. ¿Qué misterio no? Como no quieren perder el tiempo de recreo, deciden salir y seguir buscando después de jugar.
Cristina en el recreo se lo está pasando muy bien con unas niñas, cuando de repente una le dice: -Y tú. ¿Por qué llevas una col en la cabeza? Todas ríen, pero a Cristina no le hace ninguna gracia. Sólo la mira y no le dice nada. Cuando la maestra les llama para volver a entrar y las niñas se levantan para ir hacia dentro, la bromista hecha de menos una pinza del pelo. Entre todas miran y remiran, pero la pinza no aparece. ¡Qué misterio! ... (ver texto completo)
El escondite de Cristina

Hoy es el primer día de colegio y Cristina está muy emocionada.

Lo tiene todo a punto: el uniforme, la cartera, el almuerzo...

¡Sólo le falta vestirse y ya estará a punto de ponerse en marcha!

Como tiene el pelo muy, muy rizado, sólo la peinan los días que cota lavarse el pelo. Después se le hacen esos rizos tan pequeños y cerrados, y por allí ¡no hay forma de pasar el peine!
Con la cartera al hombro y el uniforme puesto, Cristina entra en clase y... ... (ver texto completo)