Atardecer en mayo, ALCONCHEL DE LA ESTRELLA

(2015)
Aquellos dotados de razón comprenderán. Aquellos con poca razón, pueden adquirirla mediante este relato.
No existe “camino” mediante el intelecto ordinario.
El ser humano no está informado acerca de la divinidad.
Cada uno había palpado una sola parte, y todos los habían percibido erróneamente. Ninguno conocía la totalidad: el conocimiento no es compañero de los ciegos. Todos imaginaron algo, pero algo equivocado.
El hombre que había tocado la oreja dijo:
-Es una cosa grande, rugosa, ancha y gruesa, como un felpudo.
El que había palpado la trompa dijo:
-Yo conozco los hechos reales, es como un tubo hueco, horrible y destrfuctivo.
El que había tocado sus patas dijo:
-Es poderoso y firme, como un pilar.