El mago pronuncio unas extrañas palabras y el maleficio quedó roto. El caballero apareció junto a su dama y juntos partieron a su hogar donde fueron felices para siempre. El caballero le dijo que aquella melodía era la que su dama le cantaba, y le contó su historia. En ese momento el mendigo se transformo en un mago alto y apuesto y le dijo:
-Habéis demostrado tener un corazón noble y la pureza de vuestro amor; haré algo por vos. -Noble caballero decidme ¿qué melodía era la que antes entonabais pues es de gran belleza? Una mañana cabalgando junto a un río mientras, cantaba la canción que tantas veces su dama le había cantado se encontró con un mendigo que le solicitó algo de comer pues aquel día aún no había comido nada. El caballero descabalgó y compartió su comida con él y le dio algo de dinero para que pasara un par de días. El mendigo quedó muy agradecido, pero antes de que el caballero partiese le preguntó: El caballero desesperado comenzó a buscar a la bella dama y a todo aquel que encontraba le preguntaba por ella.