Además de las afecciones comunes a todos los representantes de la especie; en esta variedad pueden presentarse malformaciones congenitas con prognatismo de la mandíbula, deformación de los repliegues suboculares y dificultades respiratorias imputables a la respingona naricilla. Por esto debe procurarse no exagerar los cruzamientos consanguíneos. ¿Como se reproduce?
Se atiene a la normativa válida para el grupo 'persa', siendo conveniente no acentuar los rasgos 'pekineses' introduciendo sangres de variedades que no ostenten esa peculiaridad. ¿Que cuidados necesita?
Aseo del cajoncito sanitario y vigilancia del pelaje, así como administración de agua fresca y alimentos recientes. Carácter y comportamiento
Muy limpios, cuidadosos y pendientes de su propio acicalamiento, se muestran cariñosos con sus dueños, pero adustos y altivos con los extraños. Los ejemplares que no estén castrados pueden convertir las frecuentes épocas de celo en una auténtica tortura para todos sus propietarios y vecinos más cercanos. Alimentación
Deben recibir una dieta muy similar a la recomendada para los mininos de otras razas, aunque se cuide especialmente la aportación de vitaminas liposolubles, necesarias para la conservación del espléndido pelaje.