Muy buenas oxigenadoras y excepcionales como formadoras de 'pantallas refugios', suelen disponerse en manojos agrupados en rincones laterales o zonas de 'horizonte' anteriores a las que ocupan otras especies de follaje rotundo. Si se recogen estas plantas de la naturaleza es muy importante no cambiar bruscamente la composición y temperatura del agua, pues de lo contrario se producen frecuentes caídas de hojas totales que ensucian y contaminan el acuario. Tampoco es recomendable recogerlas durante el otoño ni transportarlas descuidadamente. Por separacion de esquejes o aclareo de tallos, es decir, vegetativamente se obtienen resultados muy satisfactorios que, sin embargo, no han de inducirnos a olvidar la precaución de trasplantar poco a poco para evitar que por los cortes o heridas se produzcan emisiones de savia y jugos vegetales a veces tóxicos para algunos peces. Reproducción
La fructificación subsiguiente a la fecundación de las flores femeninas mediante el polen procedente de los órganos sexuales masculinos no es el método comúnmente empleado en acuariofilia, aunque asegure la diseminación y supervivencia de las especies, sobre todo de las que colonizan las zonas húmedas continentales sometidas a inviernos fríos rigurosos. Condiciones de mantenimiento
La temperatura del agua varía considerablemente según las especies que deseen plantarse, pero generalmente los límites extremos se sitúan entre 15 y 28 C. Requieren buena iluminación con la totalidad del espectro solar, que puede suministrarse mediante una rampa luminosa completa. La luz puede tamizarse eventualmente mediante una capa somera de especies flotantes: Salvinia o Riccia. El fondo espeso puede ser areno-limoso o incluso turboso para especies acidícolas,...