¡Efectivamente Rosa, efectivamente! Y los hombres igual, Las mujeres, como los sueños, nunca son como tú las desearías. La mujer debe liberarnos de la mujer por el mismo medio que la electricidad nos libra de la tensión por el contacto. Amiel 2005-03-05 17:15:08 Para estrella y Mª del Carmen.
Dos alconcheleras y un alconchelero a quien habían vendido un borrico los de Rada, decidieron un día pillar el portante y ir a esta aldea para ver si podían recuperar un libro de "palabras manchegas" que a una de éllas se le había caido al pozo. Los tres eran muy parcos en palabras así que os podeis imaginar que conversación tan amena tuvieron durante el camino. Noche dice: -Paece que pinta bueno el día-.
Mila asiente:-Ea.
Est. continúa:-Odo,...