Podemos hacer los mejores planes del mundo para nuestra vida, pero ninguna acción, ningún logro y ningún resultado nos harán sentir totalmente realizados. Debemos aceptarnos y aprobarnos completa e incondicionalmente, independientemente de lo que pueda suceder en nuestra vida. No les pidáis a las mujeres más de lo que ellas puedan dar. No son un tractor con faldas; no son sublimes más que cuando se equivocan. Al dar y recibir, lo más importante es la intención. La intención debe ser siempre crear felicidad para quien da y para quien recibe, porque la felicidad sostiene y sustenta la vida, y por tanto, genera abundancia. Hace unos días escribí una lista de todos los Félix que había conocido en Alconchel, pero me dejé dos sin poner: Félix el "Burrero" y su hijo Felixín (+)
Hoy felicitamos a los Félix y a Felisa, la hija de Félix (+) ("Pesetilla").
También conocemos a Feliciano, el hermano de Francisco ("Gabaldón"), al que le tendremos que dar un empujoncillo para que se decida a escribir de una vez por todas ¡Jolín, qué vergonzosos son los Alconcheleros!
Un beso, destino Francia. Así como antes decía que no he conocido a ninguna mujer, en Alconchel, que se llame Perpetua, tampoco he conocido a ninguna con el nombre de Felicidad, como no sea que la hermana "Fili" se llamase así. Aquí estaría muy bien que escribiese Josema o Isidro, y nos lo dijesen, ya que era su abuela. Nuestro recuerdo para élla.